Los líderes de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días de Baleares se reunieron el pasado 16 de mayo con el alcalde de Palma de Mallorca, el Ilustrísimo Sr. D. Jaime Martínez Llabrés y la Sra. regidora Dña. Maria Luisa Marqués Rattier, responsable del área de personas mayores e interculturalidad. A la reunión asistieron también Frank Heckmann - presidente de la Misión España Barcelona, acompañado de su esposa; Alejandro Larrubia, presidente de distrito; Rosana Díaz, directora de comunicaciones; Irene Munguía, presidenta de la Sociedad de Socorro del distrito; y Zulema Delgado, asesora de la regidora.
Uno de los objetivos de la reunión fue presentar al alcalde La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en las Islas Baleares, sus creencias y los proyectos que se desarrollan de forma gratuita en beneficio de la comunidad. El presidente Heckmann destacó la influencia positiva que la Iglesia puede ejercer en la comunidad de las Islas, especialmente en Palma de Mallorca.
Posteriormente, la regidora, Dña. Maria Luisa Marqués Rattier, tuvo una reunión más distendida con las autoridades de la Iglesia, en la que se le presentó un informe detallado de los proyectos que la Iglesia lleva a cabo, tanto a nivel nacional como mundial, tales como: FamilySearch, Sirve Ahora, Autosuficiencia, los cursos de inglés (English Connect) y los programas de desarrollo para niños y jóvenes. También se compartieron datos sobre el crecimiento de la Iglesia en España y en las Islas Baleares, y se le mostraron algunas de las actividades de servicio realizadas por los miembros y misioneros en colaboración con otras entidades.
Durante la reunión se abordaron temas como la importancia de la fe en Dios y el fortalecimiento de la familia como unidad fundamental para el desarrollo de una sociedad sana y cohesionada. La regidora, se ofreció a colaborar con la Iglesia en futuros proyectos y expresó su deseo de asistir a próximos eventos, como la conferencia de distrito y el concierto de Navidad.
Junto con el informe, se le entregó un ejemplar del Libro de Mormón y la Proclamación sobre la Familia. Todos los presentes pudieron sentir cómo el Señor prepara el camino para que Su obra continúe avanzando. Solo debemos estar dispuestos a ser Sus instrumentos para que los milagros sucedan.
