La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días participó en la Noche de las Religiones, un evento celebrado el pasado 22 de noviembre en Sant Cugat (Cataluña), organizado por el ayuntamiento y AUDIR bajo el lema “Respuestas”.
Por la mañana, la Iglesia estuvo representada por el obispo Isaac Alejandre Chía, quien formó parte de la mesa redonda titulada “Del silencio a la palabra y la acción comprometida”. Durante el encuentro, el ponente Eugeni García Rierola reflexionó sobre el valor del silencio, destacando que “el silencio no es falta de palabra, sino falta de ruido” y que este abre espacios de escucha, comunicación y experiencias. También subrayó que nuestra sociedad va demasiado deprisa y que es necesario hacer una pausa para encontrar momentos de silencio.
La mesa redonda giró en torno a la pregunta: ¿Cómo se puede compartir el silencio? Entre las respuestas surgieron ideas como: “Si no has de hacer el bien, es mejor callar”, “El silencio nos acerca a Dios”, “Del silencio al amor”, “La esencia de la fe es parca en palabras y abundante en hechos” y “El silencio nos trae respeto, revelación, reflexión y meditación”. Se destacó, además, que la oración es reverente, que el silencio permite escuchar a los demás y que ayuda a recuperar la paz cuando la hemos perdido, trayendo consciencia, restauración y el sentimiento de pertenencia a una misma familia.
La jornada matutina concluyó con una meditación silenciosa y un refrigerio compartido.
Por la tarde, la Iglesia participó en las actividades culturales con un coro que interpretó himnos en catalán y castellano, entre ellos “Em sorprèn l’amor”, “Soy un hijo de Dios”, “Getsemaní”, “Cristo me ama” (acompañado de piano y clarinete) y “The Olive Tree” al piano.