Desde principios del mes de marzo, los miembros del Distrito de Baleares se han movilizado para recoger alimentos que posteriormente las presidentas de la Sociedad de Socorro de cada unidad llevaron personalmente a diferentes organizaciones de ayuda a Ucrania.
Tras contactar con algunas asociaciones y organizaciones de ayuda a Ucrania, los miembros del distrito expresaron su deseo de ayudar con sus manos a paliar los efectos de esta catástrofe. El consejo del distrito se puso en marcha para organizar una actividad de recogida y selección de materiales lo antes posible en nuestra capilla, así que el pasado 12 de marzo se llevó a cabo una actividad de recogida de alimentos y materiales de enfermería para donar a los damnificados por esta terrible guerra. Dicha donación se realizó a través de las organizaciones y asociaciones de con las cuales habíamos contactado anteriormente: Salvemos Ucrania, Un Somriure per Txernobil, Asociación de Ayuda a Ucrania y Asociación “Per Ells”.
Se organizó un plan de difusión mediante las redes sociales para invitar a miembros y no miembros a que trajeran material, y el sábado 12 comenzamos nuestra actividad de recogida a las 10:00 de la mañana hasta las 16:00 de la tarde. A partir de ahí empezaron a venir miembros y amigos de la comunidad a traer sus aportaciones.
Una miembro voluntaria de Cáritas nos pidió también que recogiéramos un carro lleno de alimentos y material de farmacia que esta organización quería aportar a nuestra recogida. Aprovechando una actividad programada por la presidencia de los Hombres Jóvenes y las Mujeres Jóvenes, utilizamos las manos de nuestros niños y jóvenes para realizar la distribución del material. Gracias a todos conseguimos rellenar unas veinte cajas.
Todos los participantes disfrutamos del espíritu de la compasión, de la unidad, de la caridad y de la doctrina pura de Cristo. Aun a pesar de toda esta recompensa, el mejor sentimiento vino al dejar el material en las organizaciones correspondientes. Tuvimos la oportunidad de hablar con un par de voluntarios ucranianos. Tras escuchar alguna de las tristes situaciones por las que pasan sus seres queridos, tuvimos la oportunidad de decirles que nosotros como miembros de la Iglesia, como familias y como individuos, oramos y ayunamos por ellos y para que el conflicto pueda terminar lo antes posible. Con el corazón en la mano nos agradecieron y testificaron que sentían esa fortaleza espiritual, y que siguiéramos orando por ellos.
Agradecemos a todas las personas que colaboraron donando material, a los que con su esfuerzo ganas hicieron posible la actividad y, muy especialmente, a todas aquellas personas que son voluntarias en diferentes asociaciones y organizaciones de ayuda a Ucrania que dedican su tiempo a ayudar al prójimo.
Que sigamos individualmente buscando maneras de poder socorrer al necesitado. Agradecidos siempre por estar en el lado de los que podemos ayudar.